3 DE MARZO DE 2008
"Ay ... y parece que fue ayer ..."
¿cuántas veces habremos oído esta frase en boca de un adulto? ¿Realmente se ha de tomar en su sentido literal o es solo 'un decir'? Siempre me ha parecido preocupante que una persona recuerde un acontecimiento de hace 20 o 30 años como "si hubiese ocurrido ayer" ... vale, cien por cien literal no es, pero lo dicen como si sucediese hace apenas 2 o 3 años ... ¿cómo percibimos el tiempo? ¿lo percibe todo el mundo igual? ¿o depende de lo que nos fijemos?
Este asunto viene gracias a las elecciones: tengo la sensación de que no hace tanto que salió Zapatero presidente, y sin embargo, cuando eso ocurrió empecé mi carrera universitaria, y eso SÍ que hace siglos que sucedió (si hasta era una persona casi inmadura). ¿Cómo puede ser que dos acontecimientos que se llevaron a cargo en un mismo año dé uno la sensación de lejanía y el otro de proximidad? Quizás la respuesta esté en varios factores:
- En el caso de ir a votar está el factor de semejanza: y es que, hace apenas un año ya votamos a alguien (creo que al presidente de Cataluña), y cuando no se vota al alcalde del pueblo, o a los dos a la vez, vamos, que nos pasamos los años votando, cosa que hace que parezca que Zapatero saliese elegido presidente hace poco ... pero es solo una confusión que se tiene por episodios parecidos ...
- Otro motivo de "desfase cronológico" es la redundancia: Me pasó un día, hace tiempo, que leí en un periódico que se celebraba los nosécuántos años del 11-S ... y tuve la sensación de que hacía menos de ese acontecimiento,¿pero por qué? Pues porque lo han reproducido taantas y taantas veces en los medios que, por decirlo asi, atrasamos el recuerdo del día en que ocurrió. Es esta especie de "constante presencia" que nos hace tener esa sensación.
- Este motivo genera paranoias a las parejas: la revolución: así decido llamar a esos acontecimientos que cambian radicalmente de un tiempo para otro, pero que, realmente, ocurren en poco tiempo, y, sin embargo, quedan asimilados como si ocurriesen en mucho. Es el caso de los niños: "¡sí que ha crecido, si parecía que fuese ayer cuando era un bebé!". El problema es que los adultos no cambiamos tan rápido como los críos, asimilamos pues la comparación de cambio entre unos y otros y nos sorprende que "evolucionen" tan rápidamente. Pero es que realmente ocurre rápidamente, aunque creamos que un cambio corporal suceda de cada mucho en mucho, pero es que en los niño no es asi y sucede constantemente. Es quizás el caso "jet lag temporal" más extraño de todos, ya que si realmente ocurre en poco tiempo, ¿por qué queremos creer que debía ocurrir en mucho y atacamos que ha ocurrido en poco si realmente ocurre en poco? También destacar la crueldad de las arrugas, que salen derrepente y traumatizan a más de uno, descolocándole temporalmente hablando.
- Ahora un motivo que saco en base de una hipótesis: la vejez: dicen que contra más mayores nos hacemos más pausados somos, y como que el reloj no se mueve más despacio pues hace que en resultado ya no sintamos los hechos al mismo ritmo que el reloj, y por tanto, se valla más lento y la brecha temporal parezca más corta. Quizás la experiencia más próxima sea la de los niños, que cuando nosotros nos cansamos de seguir sus juegos ellos siguen con energía para rato. Ese descanso que nos queremos tomar y que siempre nos tomamos sin darnos cuenta, nos frena los actos, pero el reloj no se para, y aunque mentalmente no creamos que el tiempo pasa sí pasa y es aqui cuando viene un nuevo desajuste temporal.
- Un nuevo motivo, y quizás el más preocupante: la importancia: Tengo como la sensación de que Buenafuente lleva poco tiempo haciendo televisión en cadenas que no sea TV3 a pesar de que con datos en mano lleve bastantes años ya. Eso es debido a mi pasotismo hacia su nuevo programa, ya que contra menos tiempo dedicamos a una cosa o menos importancia le damos menos tiempo parece que pase respecto a ello. Es lo típico que pasa que igual un compañero hace 1 mes que no va a clase, que para nosotros parece que haga una eternidad que no viene y él se siente como si solo llevase 1 semana sin venir ...
Este último punto es el que nos ha de hacer reflexionar más. Ya que la "rapidez de la vida" puede ir ligado a su propia preocupación, en que una persona dejada, o vaga o, simplemente, alguien que va tirando sin pena ni gloria ni aficiones o preocupaciones puede sentir que todo va demasiado rápido. Así pues, lector, te recomiendo que no pierdas el tiempo en nadear, que estancarse no es nada bueno, y que la vida nunca para de sorprendernos con nuevos episodios. ¡A vivir, pues! ;)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario